Cuidado de uñas

 Es muy común acordarse de las uñas solamente cuando nos lastimamos o tenemos alguna enfermedad que nos aqueja. La otra razón que nos hace pensar en las uñas es cuando tenemos eventos importantes y queremos que ellas completen la belleza de nuestra imagen (o no nos hagan pasar verguenza). Pero las uñas son mucho más que eso, conozcamos un poco este mundo. Las uñas están hechas de queratina, que es la proteína que también hace la mayor parte de la piel y el cabello. En el caso de las uñas se endurece y las células en los dedos de la mano y los pies producen las uñas.



Partes

Las diferentes partes de las uñas son: lámina ungueal, cutículas, el blanco de la uña, repliegue dorso ungueal, matriz y lúnula. La lámina ungueal es lo que vemos como uña. La cutícula está hecha de tejidos y coincide parcialmente con la lámina en la base. El blanco de la uña es la piel que está debajo de la lámina. Cuando nos lastimamos la uña, el blanco de la uña es el que da dolor. El repliegue dorso ungueal es la piel que cubre la uña de los tres lados. La matriz está debajo de la cutícula. La uña crece desde la matriz. Mientras que la lúnula es la parte blanquecina en forma de medialuna que vemos en la base de cada uña.

Problemas y cuidados

El crecimiento normal de la uña depende de la raza, el sexo, la edad, la salud, las hormonas y otros factores. En general, las uñas de las manos crecen más rápido que las de los pies. Dado que una nueva formación de uña tiene lugar en la matriz, la vieja es empujada hacia afuera.

Las uñas sufren de muchos problemas, como decoloración, rupturas, rajaduras, y debilitamientos. Algunos de los problemas son efectos de enfermedades en el cuerpo, mientras que otros están relacionados específicamente con el cuidado que se les brinda, por eso que hay que tomar los cuidados necesarios con ellas. Muchos creen que alcanza con humectarlas una vez por semana, pero no es suficiente. A continuación 12 tips para el correcto cuidado de las uñas:

1. Las uñas saludables deben ser suaves, curvas, sin manchas, y no deben tener huecos ni hendiduras.

2. Asegurarse que las uñas estén completamente secas antes de limarlas.

3. Darle forma a la uña con una fina lima de uñas, no usar ninguna lima de metal.

4. Cuando se lima, mantener la forma de las uñas oval, no punteaguda, para evitar que sea susceptible a roturas.

5. La cutícula actúa como sello entre el dedo y la uña. Exfoliar suavemente las capas de cutícula que están secas y ásperas, mudando las capas muertas exteriores, expone al buen crecimiento de nueva piel.

6. Esta nueva piel protege a la matriz de las uñas, que es el centro de crecimiento, y debe ser tratado con mucho cuidado.

7. No hay que hacer la manicura demasiado sobre las cutículas. Trabajar demasiado sobre la cutícula termina dañándola y hace que se engrose, creciendo mucho.

8. Nunca utilizar instrumentos de metal o filosos sobre las cutículas.

9. Usar guantes de goma si las manos van a estar mucho tiempo inmersas en agua. Los períodos extensos en agua pueden secar las uñas haciéndolas quebradizas.

10. Aplicar fortalecedor de uñas con calcio para proveerle una capa protectora.

11. Aplicar una capa base antes de poner esmalte, para evitar que el emalte manche la uña.

12. Si las uñas tienen manchas, será necesario dejarlas crecer para que se remuevan. Igualmente, en algunas ocasiones el jugo de limón aplicado alrededor de las puntas puede revomer algunas manchas.

Otras recomendaciones de los especialistas incluyen: no comer las uñas ya que pueden causar infecciones y deformar la uña; utilizar aceite de oliva en el cuidado de uñas, dado que suaviza la cutícula y ayuda a que las uñas quebradizas se vuelvan más resistentes; evitar jabones y detergentes ya que secan las uñas y hacen que se partan; no cargar bolsas en la lámina de la uña, sino en las yemas del dedo; y por último y muy importante, mantener una dieta balanceada y nutritiva, para que las uñas se mantengan saludables y brillen.

Colores

La elección del color en las uñas es una decisión personal. Hay tonos más discretos y otros más llamativos, pero según las manicuras especialistas hay colores que se destacan más en algunas pieles que en otras. La gama de beige y blanco están en perfecta armonía con las pieles blancas. Los rosas pálidos favorecen a las pieles mates u oscuras. Los transparentes son adecuados sólo sobre uñas impecables, si no es mejor elegir

el beige. Los rojos vivos destacan las pieles muy blancas o las que son bien mate. Los tonos bordó se adaptan mejor a las uñas cortas y cuadradas. Los nacarados deben utilizarse con cuidado porque llaman mucho la atención. Los ciruela deben ponerse sobre uñas cortas y pieles blancas. Los tonos muy oscuros deben ir sobre uñas cortas y sobre piel clara. El negro debe reservarse sólo para ocasiones especiales, dado que es un tono marginal.